Manuel
de Amat y Junyent virrey español de Perú desde 1761 hasta 1776. |
¿QUÉ FUE EL VIRREINATO DEL PERÚ?
El virreinato del Perú fue una
división política y administrativa que España estableció en sus colonias de
América y que se creó en 1542. Lo formaban los territorios comprendidos, de
norte a sur, entre Panamá y Chile (excepto Venezuela), y por el este se
extendía hasta Argentina (salvo Brasil, que pertenecía a Portugal). Es decir,
en su momento de mayor amplitud, englobaba las actuales repúblicas de Colombia,
Ecuador, Bolivia, Perú, Chile y Argentina. Su vida se prolongó hasta las
primeras décadas del siglo XIX, cuando el virreinato, que solo comprendía ya
poco más de lo que hoy es Perú, alcanzó la independencia.
CONQUISTA ESPAÑOLA Y ORGANIZACIÓN
DEL TERRITORIO
En 1534, el español Francisco
Pizarro conquistó Cuzco, la capital del imperio de los incas. Comenzaba así el
dominio colonial español en la zona. En 1542, se creaba el virreinato de la
Nueva Castilla, que más tarde sería conocido por el nombre de virreinato del
Perú. Su capital fue Lima, ciudad que Pizarro había fundado en 1535. Los
primeros gobernantes del territorio fueron Pizarro (gobernador entre 1534 y
1540), Cristóbal Vaca de Castro (gobernador, 1540-1544), Blasco Núñez Vela
(virrey, 1544-1546), Pedro de La Gasca (gobernador, 1546-1550) y Antonio de
Mendoza (virrey, 1550-1552).
En los primeros años de historia
del virreinato tuvieron lugar las llamadas guerras civiles del Perú. Al
principio, enfrentaron a los partidarios de los dos principales conquistadores
del territorio: Pizarro y Diego de Almagro. Luego, a los conquistadores con la
propia Corona española. La definitiva pacificación se produjo en 1548, cuando
el gobernador, La Gasca, derrotó a Gonzalo Pizarro (hermano de Francisco
Pizarro) en la batalla de Xaquixahuana.
LA INDEPENDENCIA
Los principales virreyes del Perú
en el siglo XVIII fueron Manuel de Amat y Junyent (1761-1776), Manuel de
Guirior (1776-1780), Agustín de Jáuregui (1780-1784) y Teodoro de Croix (1784-1790).
Durante este siglo XVIII, muchos
de sus territorios pasaron a formar parte de dos nuevos virreinatos: el de
Nueva Granada (creado en 1717) y el del Río de la Plata (establecido en 1776).
Esta reorganización redujo la importancia del virreinato del Perú, que perdió
gran parte de su territorio y de su capacidad comercial.
El último virrey del Perú fue
José de la Serna e Hinojosa, el cual gobernó desde 1821 hasta 1824. En 1821,
fue obligado a huir de Lima por el argentino José de San Martín, y tres años
más tarde fue derrotado en la batalla de Ayacucho por el venezolano Antonio
José de Sucre. El virreinato del Perú había dejado de existir.