Inca es una palabra que proviene
de la lengua quechua, y quiere decir ‘rey’ o ‘príncipe’. Es el nombre que se
daba a los soberanos precolombinos de Cuzco, que establecieron un vasto imperio
en los Andes en el siglo XV, muy poco antes de la conquista española.
Pero el nombre también se aplica
a todos los súbditos del Imperio incaico. Los incas establecieron la última y
más desarrollada de las antiguas civilizaciones andinas.
HISTORIA DE LOS INCAS
En torno al año 1100 d.C., los
incas llegaron al valle de Cusco o Cuzco. Provenían del altiplano de la
cordillera de los Andes. Aunque no tardaron en convertirse en uno de los
pueblos más poderosos de la zona, su gran expansión no se produjo hasta
mediados del siglo XV. Su primer gran soberano fue Pachacutec Inca Yupanqui;
durante su reinado, los incas empezaron a conquistar otras regiones.
A Pachacutec le sucedió Túpac
Inca Yupanqui, quien continuó la expansión por la costa y la sierra norte,
hasta el actual Ecuador. Posteriormente, se dirigió al sur y avanzó hasta el
río Maule, en Chile, el punto más meridional controlado por los incas. El
Imperio incaico alcanzó su mayor extensión con Huayna Cápac (inca entre 1493 y
1525), hijo de Túpac. Cuando murió, las posesiones de los incas se extendían
por la zona sur de la actual Colombia, Ecuador, Perú, Bolivia, y parte de
Argentina y Chile.
Huayna Cápac murió, en 1525, sin
haber designado sucesor, lo que provocó la división del Imperio. Sus dos hijos,
los hermanastros Huáscar y Atahualpa, aspiraban al trono. Las luchas entre
ambos se prolongaron hasta 1532, cuando Huáscar fue derrotado. Pero ya era
tarde, pues el Imperio se había visto muy debilitado como consecuencia de la
guerra civil. En ese crítico momento, llegó a la zona el conquistador español
Francisco Pizarro, el cual recibió el apoyo de pueblos de la zona descontentos
por la dominación inca. Pizarro hizo prisionero a Atahualpa, al que mandó
ejecutar en 1533, y nombró soberano a otro hijo de Huayna Cápac, llamado Manco
Inca (conocido como Manco Cápac II). El nuevo emperador se rebeló contra los
españoles en 1536 y, aunque resultó derrotado, fundó un núcleo de resistencia
en Vilcabamba.
A Manco Cápac II le sucedió en
el trono su hijo Sayri Túpac, quien firmó la paz con el virrey español, Andrés
Hurtado de Mendoza. Los últimos soberanos incas fueron los hermanos Titu Cusi
Yupanqui (1561-1571) y Túpac Amaru (1571-1572), los cuales reiniciaron las
luchas contra España desde Vilcabamba. Túpac Amaru, derrotado y decapitado en
1572 por orden del virrey, Francisco de Toledo, fue el último monarca incaico.
Como ya has leído, la máxima
autoridad en el Imperio incaico era el inca o rey. Los incas denominaban a su
reino Tahuantinsuyu, una palabra quechua que significa ‘Tierra de las Cuatro
Partes’. Esas cuatro partes eran Antisuyu, Collasuyu, Cuntisuyu y Chinchasuyu.
La base de su organización
social era el parentesco. El ayllu era el conjunto de personas que se
consideraban parientes por descender de un antepasado común.
Los incas practicaron una
agricultura avanzada, pero también fabricaron objetos de cerámica, tejidos y
armas. Aunque no disponían de caballos ni de vehículos con ruedas ni de un
sistema de escritura, los gobernantes cuzqueños pudieron estar en contacto con
todos los territorios de su Imperio gracias a una compleja red de caminos de
piedra.
Su sistema político y
administrativo estaba basado en la agricultura y en el sistema de ayllus. Por
debajo del inca o rey, se encontraban las familias de los antiguos incas, que eran
denominadas panacas (‘familia noble’), encargadas de mantener el recuerdo del
inca fallecido, de realizar ceremonias en su nombre, de cuidar sus bienes y de
mantener las alianzas que hubiera hecho en vida.
Los siguientes niveles de poder,
tras el inca y las panacas, eran los jefes de los pueblos conquistados y los
curacas o jefes de los ayllus. Por último, los campesinos miembros de un ayllu
(la gente común) tenían la obligación de trabajar por turnos para el Imperio
(esta institución se llamaba mita).
Entre las expresiones artísticas
más impresionantes de la civilización incaica se encuentran los templos (como
el templo del Sol, en Cuzco), los palacios, las obras públicas y las fortalezas
(siempre estratégicamente emplazadas, como Machu Picchu).
El dios supremo de los incas era
Viracocha, creador y señor de todas las cosas vivientes. Otras grandes deidades
fueron Pachacamac (dios de la creación y de la vida), Inti (dios del Sol y
padre de los incas), Hamaquilla (diosa de la Luna), Pachamama (diosa de la
Tierra) e Illapa (del rayo y la lluvia).